Arquitectos: Alberto Noguerol y Pilar Díez.
Fecha: 1991-1995
Zona: corona exterior
Cuando se proyectó el Palacio de Congresos y Exposiciones de Galicia, su emplazamiento era una zona de borde de ciudad, con grandes áreas vacías, cuyo conjunto presentaba un cierto desorden. Este gran edificio se sitúa en el terreno dando la espalda a la vía de acceso, volcando su pórtico hacia el interior del recinto en el que se sitúa. Esta disposición es sólo una de las sutiles e inteligentes ambigüedades que este edificio ofrece al espectador. Su contundencia formal y claridad funcional revela al observador atento todo un rico mundo de segundas lecturas.
El edificio se concibe como un gran prisma bajo, cerrado por grandes piezas de hormigón prefabricado, situando en su centro dos grandes auditorios, de escenarios enfrentados, que se alojan en un segundo prisma, forrado en piedra. Este volumen sobresale sobre la envolvente exterior caracterizando la silueta del edificio. Alrededor de este volumen, contenido dentro del perímetro exterior del edificio, se genera un gran vacío, que funciona como ambigú de los auditorios. Todas las salas de reuniones de menor tamaño, cafetería y diversos despachos, se sitúan en los laterales mayores del rectángulo de la planta.
Los elementos interiores se diseñan con contundencia y elegancia, utilizando exclusivamente el color natural de los diferentes materiales: piedra veteada, metal, madera, etc.