S. XVIII. Barroco.
Es el templo compostelano de raíces más antiguas. De acuerdo con la tradición, allí moraba el ermitaño Paio, descubridor de las reliquias del Apóstol, a las que fue conducido por luces celestiales. La capilla altomedieval fue destruida por Almanzor y reconstruida por Diego Xelmírez en el siglo XII. De hecho, el Códice Calixtino la menciona ya entre las diez iglesias que tenía Compostela en esa época.
Sólo la portada es románica. El tímpano policromado que representa en relieve la Adoración de los Magos fue realizado en 1316; la torre y el resto de la iglesia actual son obra de Simón Rodríguez, quien en el siglo XVIII amplió el recinto considerablemente y construyó un nuevo campanario con una factura que sería muy imitada en Galicia en los años posteriores.