Entrada por la puerta de Azabachería en la Praza da Inmaculada.
Las reliquias del Apóstol Santiago y de sus discípulos Atanasio y Teodoro se custodian en un mausoleo de origen romano bajo el altar mayor de la Catedral de Santiago. Se encuentran depositadas en una urna de plata del s. XIX, labrada imitando un sarcófago románico.
Para bajar a esta pequeña cripta, es necesario dirigirse a la girola de la Catedral. El recorrido se inicia bajando al mausoleo y se visita brevemente la urna. El espacio es muy limitado.
A continuación, se sube al camarín del Apóstol en lo alto del altar mayor, donde es costumbre dar un abrazo al santo, representado por una estatua románica del s. XIII.
La salida se realiza por la Puerta de Abades, que desemboca en la Praza da Quintana.