¿Alguna vez has abrazado a un Apóstol de Jesús? Pues si eres un buen peregrino en la Catedral de Santiago puedes hacerlo. En el altar mayor te espera una estatua muy antigua del Apóstol, ¡de 800 años!, a la que le podrás dar un gran abrazo para expresar tu alegría por estar en la Catedral. Es un momento muy emocionante y además disfrutarás de una vista magnífica de la nave principal.