España es un Estado aconfesional, donde se practica mayoritariamente la religión católica, aunque existe una importante representación de comunidades como la musulmana, hebraica y evangélica.
La tradición católica jugó un papel esencial en el surgimiento y configuración de la ciudad, que es desde el siglo IX meta de la peregrinación hacia la tumba del apóstol Santiago. De hecho, junto con Roma y Jerusalén, Santiago es ciudad santa de la Cristiandad. Compostela es asimismo sede episcopal desde el siglo XII.