Turismo de Santiago participa esta semana en unas jornadas de promoción directa dirigida a los principales profesionales del sector turístico chino organizadas por Turespaña. Estas jornadas se celebran en las tres ciudades más grandes de China: Shangái, Pekín y Cantón, donde viven más de 50 millones de personas.
El mercado chino está experimentando una rápida y profunda transformación como consecuencia del aumento de la clase media, de la agilización en la política de tramitación de visados y de la constante apertura de rutas aéreas directas con destinos internacionales. Actualmente solo el 10% de la población dispone de pasaporte. Se prevé que en el 2025 serán 150 millones, de forma que los viajes internacionales alcanzarán los 220 millones.
Frente al tradicional perfil del turista chino, en los últimos años se viene observando un nuevo perfil: los millennials, jóvenes de clase media-alta que están transformando radicalmente el turismo emisor chino. Los productos más solicitados cuando viajan a Europa son arte y cultura, compras, gastronomía y turismo urbano. En este sentido, Santiago tiene la oportunidad de posicionarse en ese mercado como un destino urbano en el que descubrir el modo de vida europeo.
Además, en los últimos años se está viviendo un crecimiento muy importante en el número de personas que hacen el Camino de Santiago procedentes de China. Hasta esta década el Camino de Santiago apenas tenía presencia en el mercado chino: en 2005 hubo apenas 5 peregrinos chinos. Sin embargo, desde este año hay un incremento constante que permitió que en 2017 se superase por primera vez la cifra de más de 1.000 peregrinos chinos y que en 2018 se alcanzasen los 1.111.
El objetivo es que este crecimiento continúe en los próximos años, y que se traduzca también en un crecimiento del atractivo de Santiago como destino turístico urbano europeo, más allá del propio Camino, como ya sucede con los mercados coreano y japonés.