La bella Torre del Reloj de la Catedral ofrece su mejor cara si nos apostamos en la Vía Sacra, la bocacalle que media entre la Casa da Parra y el atrio de la Iglesia de San Paio de Antealtares. De hecho se asegura que el arquitecto Domingo de Andrade recortó la fachada de la Casa da Parra para enmarcar una vista irrepetible de su torre.